día 5
que temprano por la mañana! nos despiertan a las 5.45, en mi camarote sin ventanilla casi en medio de la noche pero fuera ya de día desde hace muchas horas. desayunamos, un poco más tranquilo que otras mañanas y nos preparamos para el primero landing. unas capas de ropa, gorra, guantes, impermeables, camera, binoculares y mucho más. la temperatura fue 3 grados pero con un viento bastane fuerte del noroeste.
puse mi primer pie a tierra antártica a las 7.23. un pequeño paso para mí, pero... casi!
la isla barrientos del grupo aitcho fue nuestra primera visita. vimos un mónton de pingüinos!! a la derecha, isquierda, enfrente pero no arriba... pingüino papua (gentoo) y de barbijo (chinstrap), distintos albatroses, el petrel gigante del sur, petrel de las nievas, skúas y palomas. además unos leopardos marinos (comen pingüinos!!) y los elefantes marinos del sur. gigante, grueso y feo. y haciendo ruidos sin respectar las modelas en la mesa.
regresamos al buque, todos contentos y con hambre...
sopa de zapallo italiano, trucha al horno con quinoa y tarta de bosque negro. luego nos informaron del programa de la tarde: primero siesta (porque vamos a navigar más hacia sur, y fue temprano hoy...) y despúes un segundo desembarco en la bahía walker de la isla livingstone.
este bahía es rellenado con elefantes marinos, vimos a dos grande grupos de unos 30 a 40 animales. los más grande pueden pesar hasta 3 toneladas!! imágense el peso del grupo... (están fuera del agua para meses cuando mudaron el pelo)
más hacia el fin de la península, punto hannah hubo una grande colonia de pingüinos de barbijo. vimos también unos pichones! el tiempo tuvo de todo: muy nublado, poco sol y también nevó. el verano antártico!
aun si se respeta las reglas (dar el derecho a los animales, no acercarse demasiado, caminar despacio,...), todavía me siento como un intruso en un ambiente muy especial, y se puede preguntarse si hacemos daño o no. tambíen es un viaje que cuesta mucho y es un privilegio poder hacerlo. creo que es una oportunida de una vez en la vida, quizás nunca más estuviere tan cerca de la antártida.
para cenar nos sirvieron una ensalada, sopa, carne con papas fritas y un tiramisu.
grande excitación cuando sebastian anunció que se avistó ballenas. todo hacia fuera o por el puente y vimos dos ballenas jorobadas. el comandante redució la velocidad así que pudimos disfrutar de los animales.
luego lo pasé hablando con otros y tomando la cerveza. estamos de vacaciones, o no?
cruzando el pasaje bransfield vamos hacia la península antártica que ahora es verdaderemente parte del continente antártida.
a las once pasé un ratito al puente cuando navigamos hacia el puesto del sol. estamos 63 grados sur!! no creo que vaya a oscurecerce...
pero bueno, mañana podría ser que hacemos un landing a las 6 de la mañana.
pero fue tan tranquila la atmosfera que me quedé hasta las dos!