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Hola!!
La ciudad nos recibiò con una lluvia torrencial, asi que la caminata desde el subte al hotel fue por lo menos interesante, sobre todo si a la lluvia le sumamos la subida empinada de las 4 cuadras, jaja
Por suerte, como nos detuvimos en la estaciòn de tren para comprar el pasaje a Praga del domingo, y tardamos mil años en hacer las 4 largas y lluviosas cuadras, la habitacion ya estaba lista cuando llegamos, asi que nos pudimos duchar antes de salir a recorrer algo.
Fuimos caminando hasta Alexander Platz, cerquita del hotel, donde almorzamos un bagel en Dunkin Donuts, y seguimos rumbo a Unter Den Linden, una linda avenida donde està el Berliner Dom (la catedral, a la que no nos dejaron entrar porque estaban en misa), la Museumsinsel (la isla de los museos), la Staatsoper y la Brandenburger Tor (no es ninguna hamburguesa! es la Puerta de Brandenburg).a Debo confesar que me estoy poniendo fastidiosa con los piesitos, que me duelen mucho mucho de tanto caminar, asì que Mariana casi que me tuvo que arrastrar para llegar hasta ahì. Aprovechamos para descansar en unos banquitos de la Pariser Platz, con vista a la Brandenburger Tor, y fuimos al Holocaust Mahnmal (Monumento del Holocausto). Para regresar al hotel, dimos una vuelta por la costanera, llena de barcitos y restaurancitos hermosos. El hotel no tiene internet, asì que tuvimos que parar en un cibercafe para conectarnos a dar señales de vida. Saliò un par de centavos nada más.
Los precios por ahora vienen bastante bien. Tanto en Madrid como en Berlin, pudimos sentarnos a comer en lindos restaurantes por apenas unos pocos euros.
Ya empezamos a hacer algunos papelones. Aunque aun no nos animamos a brindarle a Europa nuestros bailes de la ardilla, sí le estamos ofrendando nuestros cantos. Mientras estàbamos sacando fotitos en la Berliner Dom, entonamos "Aqui llegò Balà, Balà, el show va a comenzar, ya llegò, ya llegò..." y, enorme fue la vergüenza cuando se dio vuelta una pareja de argentinos para reirse de nosotras.
El segundo dìa, comenzamos por Postdamer Platz. Vimos el Kulturforum y el SonyCenter, donde desayuné una riquisima y tipica torta de manzana, acompañada por un tecito bien caliente, ya que hacia bastante frio. Los dias estan bastante fresquitos, llovizna intermitentemente, pero por lo menos como oscurece pasadas las 9pm, podemos aprovechar el dia entero. Después del rico desayuno fuimos a ver los restos del Muro de Berlin y vimos una exposicion de fotos y videos de la caida del muro y los juicios de Nuremberg. Quisimos entrar a Checkpoint Charlie, pero habia una cola larguisima, asi que seguimos de largo. Ah! Un señor que vendía souvenirs, empezó a los gritos intentando atraer nuestra atención de posibles compradoras diciendo: una negra y blanca, una mora y una rusa. Supongo que se darán cuenta quién de nosotras le hace honor a qué atributo verdad? Desde ya que la que parece rusita soy yo, jajaja. igual aunque no lo crean, con mi corta estatura, y mi oscura rulosidad me han hablado en alemàn pensando que era un de ellos. Seguro que en realidad pensaron que era una inmigrante ilegal, pero bueno, juguemos a que me confundieron con una rubia de dos metros, jaja.
Al final, como se largò a llover con todo, aprovechamos para comprar souvenirs y hacer un receso para almorzar salchichas alemanas con ensalada de papas. Despuès nos tomamos el metro y fuimos a KaDeWe, un shopping inmenso donde Marianita compró algunos chocolatitos para llevar de regalo. Yo me quedé en una confitería tomando un cafecito, comiendo turrón y escribiendo postales. No quise comprar chocolates recie comenzado el viaje, porque van a llegar todos aplastaditos. Esperarè a Austria y Polonia, que desde ahì van a tener màs chances de llegar enteritos. Al salir del shopping, paseamos por Kururstendamn y volvimos en subte hacia Alexander Platz, donde cenamos en un restaurant italiano que habiamos visto la ncohe anterior. Marianita se pidio unos spaghetti y yo no pude resistirme a la Zuppa di cipolle au gratin, que estaba muy rica.
El tercer dia estuvo màs tranquilo por suerte. Fuimos al Castillo de Charlottenburg a la mañana, y mientras Mari se dormia una siestita mañanera en sus jardines, yo me fui a recorrer el Brueggen Museum que estaba justo enfrente y tenia una hermosa coleccion de Picasso, supuestamente la mas grande de Alemania. Ah! Nos encontramos con los argentinos que soportaron nuestro homenaje a Carlitos Balà! Y resultaron ser casi vecinitos de Mariana, así que el papelón resultó peor para ella. Mejor, se lo tenía merecido por cortarse el flequillo como Carlitos Balà, jiji
Despues fuimos a un mercado de pulgas, y de ahi a una especie de fiesta (creo que era por un feriado) en el Tiergarden, un parque
muy parecido al de Palermo, donde comimos salchichas alemanas y una papas raras pero ricas. Justo habia un concierto de Baremboim ahi mismo al aire libre, asi que nos quedamos escuchando un rato. Despues fuimos a dormir una siestita en la plaza del Monumnto al Holocausto, y ya volvimos a cenar una rica sopita de esparragos por 5 euros cerca del hotel.
Ah! Mi alemàn es totalmente nulo!!! Yo creo que la gente piensa que soy mudita. Seguramente si no estuviera Mariana intentarìa decir gracias y esas palabras que normalmente uno dice, pero no, el hecho de que estè Mariana me intimida, jaja, asì que me quedo calladita. Mari me quiso enseñar a decir permiso, pero el Entchuldigen Sie Bitte para mi es Chinchulìn Si Bitte. No sè què les parecerà a uds, ni a los alemanotes, pero para mi es asì màs divertido.
Bueno, esperamos tener internet en el hotel de Praga asi subimos fotitos y sub mas relatos al blog!
Besos!
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